lunes, julio 07, 2008

Dos visiones de 'La nave', de El Choque Urbano


Una visión: 'La nave', el nuevo espectáculo de El Choque Urbano, es una confirmación de su estilo original, que no tiene otro referente en el país y que demuestra que sus directores están en plena búsqueda de su sello propio, tanto en lo musical, como en lo coreográfico. Con instrumentos de percusión ideados por el grupo, combinan recursos teatrales con una música que parece electrónica, pero está tocada por tachos, tubos de PVC y palos

En comparación con sus espectáculos anteriores, la puesta en escena creció tanto en la escenografía (la nave, que le da título al show, está logradísima), como en las coreografías, cada vez más ajustadas y arriesgadas (el sexo tiene un lugar clave). Los looks, la elección musical y el ritmo con el que se desarrolla la obra nada tienen que envidiarle a otros referentes internacionales, como Stomp, Mayumana o Blue Man Group

Otra visión: El Choque Urbano llega al Complejo La Plaza con una apuesta de la que no sale del todo victorioso. Sus ritmos electrónicos, tocados con instrumentos no convencionales (tachos, tubos de PVC, palos), se tornan reiterativos y en sus juegos actorales no termina de quedar en claro si quieren dar un mensaje o si son una excusa para hacer tiempo entre una canción y la siguiente. En este sentido, temas como el sexo y la exclusión social son sobrevolados en las escenas actuadas, pero no son profundizados

Su estética, tan parecida a Matrix, su elección musical y su puesta en escena cumplen con las Normas ISO 9000 que todo grupo de percusión no convencional debe tener: músculos, peinados originales, invitación al baile. Es un show que de tan internacional corre el riesgo de no ser de ningún lado, pero que, posiblemente, al Choque le permita hacer giras por distintos países

'La nave' puede verse los jueves a las 23 y los viernes y sábados a las 0.45 en el Complejo La Plaza (Corrientes 1660). Para más información: El Choque

1 comentario:

Unknown dijo...

Estuve el sábado.
Me pareció espectacular. Nunca los había visto en vivo, y la verdad es que me sorprendió gratamente.
Los ritmos buscan ser similares a la música electrónica, por lo tanto es obvio que tenga algo repetitivo.
Pero en varios momentos daban ganas de levanterse y saltar!
Los juegos actorales me parecieron una buena performance, no me pareció una excusa, sino un gran complemento.
Resumen: totalmente recomendado!